Este año por fin pude ir de vacaciones a México. Cuando iba a reservar billete, tuve en cuenta las experiencias que personas cercanas vivieron en aeropueros de EE.UU. Eso me hizo elegir vuelos directos y me decidí por Aeroméxico porque me cuadraban mejor las fechas.
Ahora os doy razones para elegirlos directamente:
- El personal de tierra de Barajas (español) de lo más atento que he visto en todos los vuelos que he tomado.
- Cortesía mexicana en el trato en todo momento.
- Modelo de avión con asientos de turista ¡en los que se cabía! y muy cómodos.
- Pantalla individual para cada asiento, en la que se podía elegir entre música, películas, juegos, series de televisión...yo ahora soy un maestro del Tetris.
- Aperitivo nada más alcanzar la altura de crucero.
- Menú con plato principal a elegir en Turista.
- Vaso de cristal también en clase Turista.
- Cubiertos metálicos salvo el cuchillo.
- Ofrecían rellenar el vaso con vino, incluso a los que habíamos pedido otra bebida.
- Copa de Grand Manier o Disarono gratuito para los pasajeros tras la comida.
- Azafata/os que salían a ofrecer agua y zumos durante el vuelo (sin necesidad de llamarlos).
- Pequeño folleto turístico explicativo del destino (México y Madrid).
- Hasta 8 niños solos y 2 personas en silla de ruedas tomaron uno de los vuelos sin el más mínimo inconveniente.
- Sonrisa permanente en las respuestas del personal de cabina.
En fin, que me sentí cliente y no pasajero por una vez.
Por eso y porque he viajado en otras compañías como Iberia y Airplus Comet (o cómo se llame ahora), recomiendo fervientemente volar con Aeroméxico, incluso si hay una pequeña diferencia en el precio.
